Beata María Romero Meneses
Nací en Granada, Nicaragua, en 1902, en el seno de una familia adinerada. Mi padre era un ministro del gobierno.
Cuando tenía 12 años, empecé a descubrir mi vocación. Ingresé al instituto de las Hermanas Salesianas de María Auxiliadora y realicé mi profesión perpetua en 1929.
Fui trasladada a Costa Rica y allí me convertí en profesora de música, pintura y mecanografía, fui también catequista.
Siempre tuve un profundo deseo de ayudar a la gente a acercarse a Dios de una manera personal.
Mi misión se concentró en lo social. Quería que la gente pudiente encontrara la manera de ayudar a los más pobres, así que organicé una obra de recaudación de fondos. Organicé centros recreacionales, comedores y centros de distribución de alimentos, una clínica y una clínica para niñas pobres.
En la ciudad donde viví, San José (Costa Rica), mucha gente vivía en condiciones de pobreza extrema, así que organicé la construcción de muchas casas para que la gente pobre pudiera encontrar un lugar apropiado para vivir.
Morí de un ataque al corazón, en Nicaragua.